Desde hace dos meses, armados del frente 33 de las disidencias de las Farc y el frente nororiental de la guerrilla del Eln sostienen una guerra por el control de la región del Catatumbo que ha desatado una crisis humanitaria y de orden público que deja más de 56.000 personas desplazadas y al menos, 85 muertos, según Medicina Legal.Pese al despliegue de 10.452 uniformados en esa zona del país, en el marco de la ‘Operación Catatumbo’, los grupos armados siguen delinquiendo en la zona, e incluso, en los últimos días, han sostenido fuertes combates que han llevado al confinamiento de las comunidades. EL TIEMPO conoció información de inteligencia militar que da cuenta del poder que ahora está teniendo en el Catatumbo el Frente 33, luego de que se lograra el repliegue de armados del Eln. Uno de los armados heridos en Catatumbo. Foto:Cortesía“Esta situación quedó en evidencia el pasado 9 de marzo, cuando los dos grupos armados sostuvieron fuertes enfrentamientos en la vereda Versalles (Tibú). Ese día eran demasiados los sujetos de ambos grupos, pero el poder de las disidencias era mucho mayor, tanto en hombres como en armas”, señala el reporte de inteligencia conocido por este diario.La información señala la llegada de, al menos, 150 hombres desde Arauca y el Magdalena Medio para reforzar a las disidencias en la zona.“En las últimas confrontaciones ambos grupos hicieron uso de drones con explosivos, rampas con explosivos y francotiradores. El Eln se ha visto débil; incluso, se quedó sin armamento y sin municiones. Se puede decir que las ganaron esa confrontación”, dice la información.Miles de desplazados en el Catatumbo han buscado refugio mientras huyen de la guerra. Foto:Cámara de RepresentantesEsos enfrentamientos dejaron un número indeterminado de muertos y heridos. “Se dice que entre los fallecidos hay un importante cabecilla del Eln”.Pero hay un dato más revelador: las disidencias han llegado casa por casa a sacar a los miembros del Eln que se están escondiendo en las viviendas de los pobladores de la zona.“El Eln en el Catatumbo, recordemos, ya no está en campamentos, sino que están en las casas de los habitantes de los municipios para evitar ser atacados por las tropas, de ahí que las disidencias saben dónde están”, señala la información.Incautación del material material de en Catatumbo. Foto:CortesíaIngreso de la tropaTras la confrontación en Versalles, las tropas ingresaron a la zona y el Eln sostuvo combates con el Ejército. “El resultado de esa operación fue un miembro del Eln capturado, cuatro neutralizados y dos heridos. Además, ese día se recuperó material de guerra”, se documenta en el reporte.Tras varios días de tensa calma, durante la noche del lunes se activaron de nuevo las confrontaciones entre disidencias y Eln, pero esta vez en la zona del kilómetro 25, entre el Tarra y Tibú.La información de inteligencia señala que en el Catatumbo las disidencias lograron atrincherarse en varios puntos de los 11 municipios que conforman la región en Norte de Santander. “En estos puntos como El Aserrío y San Pablo, el Ejército no ha podido realizar operaciones militares”.“Cuando los uniformados van a realizar el despliegue, se dan cuenta de que los armados están rodeados de mujeres y niños; en otros casos están vestidos de civil y entran a las casas, lo que dificulta las operaciones”, dice el informe.Y en otro de los casos, las tropas se movilizan con menores que han sido reclutados. “Los grupos armados se están fortaleciendo, es con ese tema, con el reclutamiento de los niños y niñas”.EL TIEMPO solicitó hablar con el comandante militar designado para la zona, el brigadier general Mario Contreras Guineme, om con algún vocero, pero inidcaron que los oficiales se encuentrán en un consejo de seguridad en Aguachica, César. Redacción JusticiaJusticia@eltiempo.comMás noticias de Justicia: